Café en mano en la terraza con vistas al mar Mediterráneo, el sol radiante brillando en el Levante español, la brisa entrando por la ventana y el sonido lejano del mar despertando a Calpe es como comienza la mañana en este piso. Una vivienda pensada para aquellos que aprecian la tranquilidad sin renunciar a la cercanía de todo lo necesario (supermercados, colegios, centro médico, Guardia Civil, etc.). El salón es ideal para relajarse a solas o celebrar cumpleaños con toda la familia y, lo más importante, no hay vecinos entrometidos ni ruidos molestos. Este espacio está diseñado de tal manera que cada vez que entras, te sientes como si estuvieras en casa.El acceso al aparcamiento subterráneo se realiza a través de puertas automatizadas y la amplia plaza de garaje está conectada a un gran trastero. La propiedad está muy cerca del ascensor que te llevará a casa. La comodidad es lo que define esta vivienda.